Crick se
encontraba en la bodega que habían alquilado para las torturas de los prisioneros,
sin embargo este día, no la estaban utilizando para utilizar a algún esclavo o
prisionero, si no a uno de los mejores cazadores de la época, sin embargo el
alto mando lo había estado vigilando ya que últimamente se había dedicado a
hacer negocios extraoficiales, así que el jefe había ordenado vigilarlo muy de
cerca.
Habían encontrado a Watson en una
carretera muy lejana y en ese mismo momento había sido capturado ya que todo el
equipo que le habían otorgado murió en una sola noche. Así que ahora se
encontraba en la mesa metálica, donde por lo regular el torturaba ahí a sus
propios prisioneros. “que irónico, el torturador siendo torturado”
La entrada no era nada importante,
de hecho la bodega era un cuchitril pero servia para lo que se usaba, Crick se
acerco a Watson pacientemente.
-Watson,
Watson, que has estado haciendo camarada?- lo dijo caminando de un lado a otro
– el jefe quiere una buena explicación, si no me la das, tendré que ejecutarte-
sonrío ligeramente – así que me dirás? – Watson asintió desesperadamente
-Pues
veras, no había dicho nada, pero – Comenzó a toser – pues encontré una familia
de demonios – callo por un instante –al principio era un rumor, luego comencé a
investigar, lo único que quería era darle al jefe buenas noticias – se empezó a
quejar – los capture, cinco de seis, pero la sexta nos embosco, estaba muy bien
entrenada.
-
Continua Watson, que me estas convenciendo.
-Mato
a todos, incluso a Zadist. Son seis!, no podía echar a perder la oportunidad.-
comenzó a toser nuevamente. Crick comenzó a caminar pensativo y sonriente.
-Bien,
bien, Watson creo que son buenas noticias a pesar de todo.- se le acerco y lo cacheteo
– al jefe le van a gustar tus noticias. DESATENLO, LLEVENLO AL CENTRO OFICIAL.
Entonces
salió de la apestosa habitación y comenzó a reír a lo alto, si esto era cierto
seria una gran hazaña para los cazadores. Y enfurecería a los demonios, así que
si capturaban a esos, pues el jefe estaría dichoso, ese Watson hizo algo
demasiado importante.
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